En qué libro sagrado encontraste
-mujer cabalista-
que las letras de mi nombre
conjugaban con la palabra amor.
En qué secreta playa
del mapa de mi genoma humano
encontraste escondida tanta pasión.
Cómo diste música a nuestro romance
con una sinfonía de galaxias
y dibujaste un beso nuestro
con polvo de estrellas
en el firmamento nocturno
para recordar ese momento
hasta la consumación de los siglos.
